Y es que hoy sonreí, porque, cada vez que le doy una vuelta sol, me acerco más a usted. Pronto se despejarán las dudas y será usted mismo el que me reciba para contármelo todo.
Aún debo seguir caminando para poder entender su sabiduría. Aún tengo mucho que aprender.
No hay comentarios:
Publicar un comentario