viernes, 21 de marzo de 2008

Semana santa, si como no…


Viendo un programa en televisión me di cuenta como ridículamente se pelean tres de las grandes religiones por un lugar supuestamente santo. Luego vengo a hablar con una persona que pertenece al cristianismo protestante y me dice que la Iglesia católica está en un grave error, cuando pregunto si la iglesia católica se irá al cielo, este me responde “si confiesa que Jesús es el señor entonces si” pero al indagar más con esta persona descubrí que para él confesar significa aceptar que la Iglesia católica está mal y que la iglesia protestante está bien. Meditando posterior a esto, y viendo luego en las noticias que un radical musulmán se inmola en un autobús en España llego a la conclusión que la única forma que el ser humano se empiece a acercar al conocimiento de los grandes profetas es alejándose de la religión. Únicamente cuando te alejas de la religión y te ves como un ser humano te das cuenta que el que está a la par tuya podría ser tu hermano. Me parece impactante que luego que los doce apóstoles hayan escrito sus diferentes evangelios (incluyendo a judas) solamente cuatro aparezcan en la Biblia ¿y los otros ocho? Cada uno escribió lo que según su visión Jesús quiso decir, pero, como cuatro coincidieron y como esos cuatro compartían la ideología de la nueva y lucrativa religión cristiana pues a incluirlos y dejar por un lado los libros que veían a Jesús como un sabio, por ejemplo el libro de Tomás, que ve en Jesús a un líder de pensamiento, un ser que, según Tomás funda las bases del nosticismo, pero al igual que el evangelio de Judas quedan en el olvido.

Y es que investigando me doy cuenta que Dios está dividido en tres partes, pero no las que nos dice la Biblia, sino en Musulmanes, judíos y cristianos. Y estos tres a su vez se dividen en otras ramas, si no basta con ver el cristianismo que tiene tantas divisiones como se le han ocurrido. Y si dejamos a un lado a estos tres simpáticos amigos nos encontraremos con los budistas que no son para nada pocos. Si nos basamos en esto, al llegar el día del juicio final solamente un poco de gente sería salva y los demás quedarían en el infierno con una terrible decepción de haber dejado sus vidas en una práctica que no agradaba a Dios. Afortunadamente ya varios líderes proclaman la búsqueda de Dios en el interior y fortalecer la fe sin necesidad de pelear y contradecir a los que proclaman una distinta.

En mi humilde opinión es preferible alejarse de ellas, es decir, tomar lo bueno de cada una, alimentar el alma, y tratar de vivir en paz contigo mismo y con el ser humano. No hay que preocuparse si la religión del otro es la correcta o no, de hecho, no escribo esto para cambiar la visión de nadie, simplemente me parece que, como Tomás, he visto en Jesús un gran líder espiritual y un gran pensador, que al igual que varios profetas proclamaron la sabiduría y la meditación como máquina para entender al propio ser humano. Cuando el hombre progrese, sea compasivo y tenga amor, entonces se podrá alejar de las religiones y estas morirán, mientras tanto la humanidad tendrá que seguir soportando a gente egoísta, cruel y defensora de un ideal que muy probablemente los llevará a la muerte más que al amor, gente que desprecia, discrimina y se burla del que no comparte su ideal. Pero si nos unimos como seres humanos, si seguimos mostrando amor, si somos positivos y pensamos en el progreso humano más que en una linda capilla podremos empezar el cambio, ese cambio que iniciaron esos grandes como Jesús, Buda, Mahoma o Abraham entre otros. Dejemos de excusarnos en las religiones para hacer maldades, si queremos ir a la playa o darnos obsequios a nosotros mismos no hay necesidad de montar la payasada que es so pretexto de un día santo, disfrutemos de nuestras vacaciones, démonos regalos y permitamos que el amor se apodere de nosotros día a día y digamos adiós a las ataduras religiosas, semana santa, si como no.