domingo, 27 de mayo de 2018

El relojero. Parte I

En una vieja oficina me encontraba revisando documentos.

Las personas pasaban una a una, y yo les revisaba su documentación; Uno, otro y otro.

De pronto, alguien se paró a mi costado pero no tenía documentos.

Lo volví a ver y era un hombre entrado en años, delgado, bajo de estatura, con una gorra vieja y una gabacha que cubría su atuendo. Sus antojos se quedaban a la mitad de su nariz, y él, me miraba por encima de ellos.

¿Tiene sus documentos? Pregunté.

Pero él, sonrió, tomó aire y me preguntó ¿Ya reparó su reloj?

No hay comentarios: