Pero la vida se apiadó de su alma y dándole otra
oportunidad, le hizo renacer el tres de abril de ese mismo año.
Y hoy, veintiséis años después, la gente murmura al ver
pasar a esa inteligente y hermosa chica
que agradece su existir. Y es que a ella le importa poco el qué dirán; Porque
vive para sí, segura, viviendo con sentido, con pasión, con alegría, cómo si la
vida le estuviera dando una segunda oportunidad.
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